Corazón y presencia.

“Durante todos los días de tu vida, nadie será capaz de enfrentarse a ti. Así como estuve con Moisés, también estaré contigo; no te dejaré ni te abandonaré.”

Josue 1: 5

“No te dejare, ni te desampararé”. En español ambas cosas suenan lo mismo, pero en hebreo, dejar a alguien es privarle de nuestra presencia, y desampararle es privarle de nuestro amor. Usted puede desamparar a alguien, y todavía vivir con ellos y usted puede dejar a alguien pero todavía amarlos.

Dios dice “mi presencia física está ahí, Y también todas mis emociones están contigo”, porque, CUANDO DIOS QUIERE VER A ALGUIEN ALCANZAR GRANDEZA, ÉL NO SE APARTA, NI DEJA DE AMAR.

Ahora esto funciona también para nosotros, si queremos que algo alcance grandeza tiene que estar nuestra presencia y nuestro corazón allí

No puede ser que decimos que queremos que la iglesia o que la célula crezca si no está allí nuestra presencia y ahí también nuestro corazón.

La razón por la que la gente abandona cosas, es porque ellos no se sienten bien amando esas cosas, ellos sienten que hay cosas mejores que ellos deberían de amar y que ellos deberían de poner su presencia.

Si usted siente que su presencia en un lugar es atacada y peligra, lo que termina sucediendo, es que usted va a retirar su presencia y va a retirar también su amor

Por ejemplo en una casa donde solamente hay maltrato y odio, su presencia no puede estar tranquila, y nunca va a estar tranquilo su amor.

Pero Dios dice “yo no te dejaré ni te desampararé”. Aunque en tu casa haya esqueletos y haya hacia mi maltrato.

Dios dice “yo sé que todavía no has entendido la fe, pero yo no te voy a dejar ni te voy a desamparar.” Yo sé que sigues dudando pero no te voy a dejar no te voy a desamparar”

Si Dios está tan comprometido con una persona imperfecta, ¿Será posible que nosotros nos comprometemos con un sueño que tal vez es imperfecto, un negocio que no está funcionando, un hijo que tal vez es un delincuente, un matrimonio que está patojeando?, O cuando usted huele el problema, se olvida, se aparta y desampara, abandonando el sueño que Dios le dio, Solamente porque las cosas se pusieron difíciles, recuerde para ganar tiene que nunca rendirse.

Sansón es la persona más rara en toda la Biblia porque por momentos el predicado una palabra bien cosa seria y de ahí se iba y se escondía y buscaba cosas que eran prohibidas y sin embargo Dios nunca lo dejó ni lo desamparo.

Y Sansón, en el último minuto de su vida, en el último respiro que él tuvo, el logró hacer más, y logró destruir, y logró hacer todo lo que Dios le había propuesto hacer porque el terminó arrepintiéndose y poniendo su vida en orden, es cierto pagó un precio caro por la desobediencia, pero Dios siempre pudo cumplir el sueño de Sansón que había puesto dentro de él.

Los días de gran bendición vienen, ¿cuál es mi sueño, que tan comprometido estoy en él?.

Padre, dame valor para nunca rendirme, ayúdame a estar contigo en dondequiera que tu vayas, que ni mi presencia ni mi corazón se aparten de tu camino, ni se aparten de ti, que mi corazón este siempre en tus sueños.

por pastor Ignacio